Mensaje del coordinador nacional de Movimiento Ciudadano, Clemente Castañeda, sobre el cobarde asesinato de Abel Murrieta, candidato por la Alcaldía de Cajeme, Sonora.
Con profundo dolor y mucha indignación, rabia y coraje, confirmamos que en un cobarde atentado fue asesinado Abel Murrieta, nuestro candidato a la alcaldía de Cajeme. Y dos compañeras de su campaña resultaron heridas y se encuentran hospitalizadas.
Abel era esposo, padre, abuelo, un ser humano excepcional, que no merecía ser una víctima más de la violencia que se adueñó del país.
Nuestras más sinceras condolencias a su familia y seres queridos. Cuentan con nosotros para todo. Abel era un hombre ejemplar. Un hombre intachable y valiente. Un hombre de una sola pieza.
Fue procurador de Sonora 9 años y salió con la frente en alto, con su reputación intacta, y la tranquilidad que solo puede tener quien siempre actuó de manera correcta y cumplió con su deber. Abel tenía la conciencia tranquila, tanto que nunca tuvo escoltas ni chofer.
La honestidad, valentía y compromiso con la justicia de Abel queda de manifiesto con su participación en la defensa jurídica de la familia Lebaron, quienes ya manifestaron su pesar por este terrible asesinato. Queda de manifiesto que el crimen gobierna Sonora. Las autoridades de seguridad, estatales y federales, están rebasadas.
Los ciudadanos vivimos con miedo pero, en Sonora, en Cajeme, pasaron del coraje a la participación y, hoy, con balas, los quieren condenar a la desesperanza. Abel pagó por haber dicho una y otra vez en su campaña que tenía el valor de enfrentar al narco y que iba a poner orden en cuanto llegará a la alcaldía.
El asesinato de Abel no puede considerarse sino como un atentado a la democracia en Sonora. Responsabilizamos de la muerte de Abel a la gobernadora Claudia Pavlovich y al presidente Andrés Manuel Lopez.